8 de noviembre de 2009

Los niños acosadores y doña loca

Guadalajara es una bella ciudad, pero se encuentra en constante crecimiento, el crecimiento trae consigo ventajas y desventajas, no se si sea yo el único que ha notado que el número de vagabundos en el centro de la ciudad va en aumento, de cualquier forma, una experiencia divertida el día de hoy me dio ganas de escribir.

Una ocasión que Belén y yo fuimos al balneario de lo camachos tuvimos que caminar hacia la normal de maestros por que por ahí salen los camiones que van al balneario, caminábamos por la catedral y vimos a un niño de pie sosteniendo lo que parecía una hoja de papel. Al pasar caminando cerca de el se avalanzó sobre mi con una calcomanía en la mano, yo realicé una maniobra evasiva para evitar que me pegara su calcomanía y el niño aferrado corrió tras de mi. Belén no paraba de reír al ver como un niño me perseguía y yo salía corriendo esquivándolo, fue cuestión de un instante. Me detuve y pegó su calcomanía y de inmediato extendió la mano para que le diera dinero, despegué la calcomanía y se la dí, Belén todavía se reía. Lo que mas me indignó fue ver a la pinche madre aplastada huevonenado mientras su morro ganaba dinero para mantener a esa cerda saco de porquería buena para nada. Me caga que exploten a los niños, yo no autoricé que me pegaran esa calcomanía, no les dimos ni madres y le seguimos, pero a mi me molestó bastante el asunto.

Hoy fuimos al centro, nos dirigíamos a la plaza de la tecnología, yo traía mis orejeras STEREN rotas y mientras caminamos por la acera una vieja loca se puso una bolsa de mandado en la cabeza y empezó a bociferar, "yo también traigo mis audífonos, pero los mis son mejores que los tuyos y no me costaron nada, solo sacarlos del basurero" y otras cosas que no recuerdo, lejos de molestarme me causó bastante gracia pues fue algo bastante chusco, pero no maaames, que pedo con esa pinche gente loca que anda vagando por ahí, me cagan los pinches locos, hablando solos como los pinches locos que son, o gritándole a uno puras pinches pendejadas, para que chingados queremos manicomios, los locos andan por todos pinches lados.

Estuvo botana el encuentro con doña loca, pero esa gente es un peligro (no para mi) pero uno nunca sabe cuando se van a alebrestar y hacer alguna babosada.

Éxito.